¿A tu favor? La distancia ahora mismo.

Cómo me gusta estar tan separados. Y que después de tantos años vuelvas a olerme sobre el cuerpo de una rubia, en ese momento más mayor que tú. O recordarme al escuchar una canción que hable sobre imposibles impotentes colindantes en espacio, tiempo futuro y pasado. y si hay momentos de flojeo y duda ya me encargo yo, de volver a ti como una hostia entre los dientes. El dilema que te tatué de por vida si era yo la chica de la tuya no me lo perdonarás nunca. Pero yo ya lo he hecho, y no me va nada mal.  Mírame ahora te escribo y no es a ti, sino a mi, a quien echo de menos. Ahora me es indiferente como estés. Creo que no es ahora, sino siempre. Por lo que supongo que me perdonarás. Otra vez y otra más. ¿He escrito indiferente? Quería decir en diferido.